Con la experiencia de haber vivido un 2020 con clases a distancia, los profesores de los colegios de Fundación Nocedal cuentan cómo, con mucha motivación y poniéndose en el lugar de los niños, promueven la participación en las clases a distancia y realizan acciones para aumentar el sentido de pertenencia de la familia hacia el colegio.
En el caso del colegio Almendral han tenido mejor asistencia que el 2020, principalmente, porque las niñas que son mayores ya tienen una cultura, son más autónomas al momento de asistir a las clases on line y se las ve motivadas. Por el lado de las profesoras, se han capacitado en habilidades digitales para poder realizar una clase on line más eficaz, logrando no sólo un mayor aprendizaje, sino que poniendo como objetivo principal la participación de las niñas. Cosa clave para la motivación.
“Es importante que en una clase on line no esté todo dado, hay que generar una discusión y mantener la atención de la alumna. Tratamos de hacer pensar a las alumnas y lograr que ellas expliquen lo que están aprendiendo para que así ellas se motiven aún más. Las clases on line no son para ir a escuchar información porque los niños son entes activos del aprendizaje”, dice Loreto De Vidts, directora del establecimiento.
En el colegio Trigales del Maipo, de Bajos de Mena, el año pasado las niñas recibían un cuadernillo y veían videos grabados, ahora el desafío es mayor porque asisten a clases on line y en un horario establecido.
“En general, hemos tenido una buena recepción por parte de las familias y las clases on line facilitan la vinculación con las estudiantes, pudiendo atender las dudas de manera inmediata e ir evaluando clase a clase para modificar la enseñanza”, cuentan educadoras y docentes del colegio Trigales del Maipo.
Desde el colegio femenino de Bajos de Mena argumentan que este salto a las clases on line ha sido un cambio importante y que ha tenido un impacto positivo no sólo en el tiempo que dura la clase, sino que en la relación que se establece con las niñas y las familias. Las profesoras cuentan que ha sido mucho mejor este nuevo sistema, ya que de esta forma las alumnas pueden resolver sus dudas junto con ellas en las clases y no solamente con un video. Además, tienen una rutina, ya que deben conectarse “temprano” y hacen las tareas en un tiempo determinado.
En PuenteMaipo han instalado un programa de trabajo basado en tres ejes. El primero consiste en crear un buen ambiente de clases, en el cual el profesor tiene que establecer vínculos afectivos con los alumnos, a través de un tono de voz cálido, hablándole a cada uno por su nombre y estableciendo rutinas y normas claras.
El segundo eje es el de las técnicas de participación. Oscar Garrido, subdirector del colegio, explica que los profesores se han capacitado para utilizar diversos métodos. Entre ellos se cuenta, por ejemplo, el “Hacer Ahora”, que es una técnica para que el alumno vincule lo que aprendió en la clase anterior y se introduzca en lo que viene. Gracias a la asesoría de Aptus Chile y a la creatividad de cada uno de los docentes, las técnicas han logrado muy buenos resultados, permitiendo que los alumnos sientan que han aprendido y se sientan competentes. “Esto es imprescindible, explica Oscar Garrido, para que se genera involucramiento en el aprendizaje”.
Al finalizar la semana, con todas las técnicas utilizadas, se puede ver si el alumno ha aprendido o no. Los que no lo hayan logrado, recibirán reforzamiento el día viernes, en que no hay clases. Eso rebota en la participación, señala Garrido, porque todos se sienten capaces, nadie anda colgado o con algún vacío. Vamos llenando vacíos en la misma semana”.
En el colegio Nocedal están muy contentos pues este año han logrado muy buenos niveles de participación y asistencia. El profesor Emerson Ospina explica que se están utilizando diversas herramientas y plataformas para lograr motivar a los alumnos. Algunos de ellos, como Kahoot, una forma de aprender jugando, o Nearpod, han permitido que los estudiantes sientan que son protagonistas de su aprendizaje al no estar solamente en clases expositivas. Además, se ha incentivado mucho el trabajo colaborativo entre los alumnos. El hecho de hacer trabajos en conjunto con sus compañeros ha resultado una buena forma de mantenerlos motivados.
El profesor Ospina explica finalmente que otra de las fórmulas que han utilizado para lograr que los alumnos sigan conectados “es que tenemos un plan de evaluación muy claro, con pautas claras y eso ha hecho que los muchachos sepan a donde tienen que ir, haciendo sus evaluaciones en el tiempo que corresponde”.