Fernando Saavedra, director de la orquesta del Colegio Nocedal desde el año 2007:
“La posibilidad de desarrollar una disciplina artística de manera sistemática en el colegio es un regalo”
Este año la orquesta del Colegio Nocedal cumple 20 años. Con un escenario distinto, pero igualmente agradecidos, su director nos visibiliza qué ha significado contar con este “conservatorio” en el primer colegio de la Fundación Nocedal.
1-¿Cuál ha sido el aporte de la orquesta a los alumnos de Nocedal en todos estos años?
Si bien hoy es una tendencia la creación de orquestas infantiles y juveniles a nivel escolar, todavía esa tendencia no es masiva. La Orquesta Infantil del Colegio Nocedal fue la primera en La Pintana, pionera en la RM y a nivel nacional. Desde este punto de vista, la creación del proyecto ha impactado no solo a los alumnos, sino que a toda la comunidad. Su irrupción resultó ser un aporte al desarrollo y acceso de las artes y la cultura para las familias del colegio y la comuna de la Pintana, así como un referente a nivel nacional.
La posibilidad de recibir este beneficio en el colegio, de desarrollar una disciplina artística de manera sistemática, es un regalo. La familia que quisiera hacerlo por sus medios encontraría la dificultad económica como barrera de entrada, ya que requiere una inversión importante: instrumento, accesorios, profesor particular, etc. El colegio facilita los instrumentos y el equipo de profesores que realiza las clases a los alumnos. Es como un pequeño conservatorio dentro del colegio.
Quienes han integrado la orquesta han tenido la posibilidad de vivir la experiencia artística, no solo de apreciar la música, sino que también transformarse ellos mismos en generadores de esa belleza. La búsqueda de lo bello no es un camino artificioso, no es tocar mejor por tocar o por ser mejor que el otro, es porque busca recrear una y otra vez esa belleza: lo trascendental, lo que nos conmueve, aquello que no podemos expresar con palabras, el lenguaje de lo universal. El ritmo que es orden y estructura en la música da orden a la propia vida, la armonía de lo musical y se vuelve armonía de lo interior.
Los alumnos han tenido incontables posibilidades de mostrar su trabajo a través de presentaciones en su país, ser reconocidos por su trabajo y esfuerzo. El aplauso y reconocimiento del público son también un bálsamo para desarrollar la autoestima, de sentir “que soy capaz”. Sentir que soy parte de un grupo y que dependemos del esfuerzo colectivo. Son grandes lecciones para la vida.
Por eso, muchos de los exalumnos que participaron de la orquesta continúan hoy tocando sus instrumentos, la mayoría de ellos con carreras en el área de la ingeniería. Estos egresados han adquirido un valor que los acompañará siempre. Incluso quienes estuvieron un tiempo corto en la orquesta y, posteriormente, no continuaron desarrollando la música, han adquirido el valor de llevar más cultura a sus vidas, de sensibilizarse y comprenderla mejor.
2-¿Cuál es el rol de los profesores de instrumento?
Considero que es muy especial, ya que las clases de instrumento son individuales, por lo que a lo largo del tiempo se desarrolla una cercanía y cariño con los alumnos. Ese espacio da la posibilidad de conocer mejor a los niños, sus problemas y preocupaciones. El profesor muchas veces se transforma en un mentor y soporte importante, junto con entregarles una invitación semanal a no claudicar ante la adversidad.
El tiempo es un factor importante para mostrar cómo se van creando estos lazos. Hace algunos años trabaja conmigo Diego Herrera, un exalumno de Nocedal, y este año se le contrató como profesor de violín de la Orquesta que lo vio nacer.
Hay otro caso digno de recordar. Hace algunos años Alejandro Vera, también exalumno, ganó el puesto de 1er fagot de la Orquesta Clásica de la Universidad de Santiago, pasando a compartir atril como jefe de fila con la que fuera su profesora de fagot en el colegio.
3.-¿Qué tienen en mente para conmemorar los 20 años de la orquesta? Hemos comenzado el año con audiciones, aprovechando el tiempo previo a la cuarentena, para poder llenar las vacantes en los distintos instrumentos. También, tenemos muy presente el aniversario 20 de la Orquesta y estamos planificando en base a los posibles escenarios de cara al segundo semestre. Sin duda esperamos que pueda ser un momento especial, lleno de agradecimiento y de compartir con toda la comunidad que ha visto crecer este hermoso proyecto.