La comunidad escolar de los colegios Trigales y PuenteMaipo se unió para rendir un sencillo y emotivo agradecimiento a la Sra. María Luisa Vial y al Grupo Claro Vial, durante la bendición e inauguración de las segundas etapas de los colegios Trigales y PuenteMaipo. Y es que hace doce años, la Fundación Nocedal pudo cumplir un nuevo sueño, llegar con un colegio masculino a Bajos de Mena, el colegio PuenteMaipo, y más tarde, con el colegio Trigales de niñas. Esto, gracias a una generosa donación, que hoy está dando frutos en uno de los sectores más vulnerables de Santiago.

La inauguración y bendición comenzó en PuenteMaipo, donde los niños estaban orgullosos de poder recibir a las visitas que vendrían a conocer su colegio. “Soy Benjamín de primero básico y les doy la bienvenida a PuenteMaipo”, decía uno de los niños al recibir a estas personas que llegaban a la bendición e inauguración. Ceremonia que estuvo marcada por agradecimientos hacia quienes hacen posible que estén estos colegios, que benefician -actualmente- a 1069 alumnos, entre Trigales y PuenteMaipo, y se proyectan como establecimientos técnico profesionales con la especialidad de programación.

Durante la inauguración, el presidente de la Fundación Nocedal, Max Lemaitre D., dijo “Hoy es un día de acción de gracias para todos los que formamos parte de la comunidad de los colegios PuenteMaipo y Trigales del Maipo. Damos gracias, en primer lugar, a Dios, quien ha querido estos colegios y ha movido los corazones de quienes los han hecho posibles”.

En la misma línea y, muy agradecida, Daihan Rodríguez, apoderada de Trigales y PuenteMaipo, contó que “estos son colegios de muy buena calidad, con docentes de excelencia, quienes otorgan no solo educación sino valores, enseñando con mucho cariño, a través de actividades lúdicas y recreativas. Destacó el nivel de educación, debido a la necesidad de colegios de este nivel en lugares como Bajos de Mena, entregándonos una oportunidad como familia para la educación de nuestros hijos. ¡¡Atesoramos nuestros establecimientos!!”, reforzó Daihan, durante la ceremonia.

Estas segundas etapas de los colegios Trigales y PuenteMaipo beneficiarán a los alumnos y alumnas con nuevas salas de computación, biblioteca, aumento de salas de clases, salas para el aprendizaje de la especialidad de técnico en programación, auditorio, entre otros; impulsando así la educación del sector de Bajos de Mena, en la comuna de Puente Alto.

Los directores de PuenteMaipo y Trigales también se sumaron a los agradecimientos y, en sus palabras, hicieron un recorrido por lo que han significado estos colegios y cómo, con cariño y perseverancia, se han instalado en el corazón de las familias de Bajos de Mena, comuna de Puente Alto.

“En estos años de crecimiento lo más importante ha sido el crecimiento de nuestros alumnos y sus familias. Son cientos de historias en las que los padres -a pesar, en muchos casos, de no haber terminado Educación Básica- han asumido con plena responsabilidad su tarea de “primeros educadores”. Con su apoyo diario en el trabajo escolar y en la formación de virtudes, han sido pilares para el crecimiento académico y humano de sus hijos”, dijo, durante la ceremonia, Miguel Arce, director del colegio PuenteMaipo.

Asimismo, Andrea Gumucio, directora del colegio femenino Trigales del Maipo dijo que “Agradecemos a todas las personas que con enorme generosidad y cariño hacen posible nuestros Colegios. Gracias a ellos podemos trabajar para expandir los sueños de tantos niños como sus familias. Dando un espacio seguro, positivo y amable, donde cada uno de ellos puede desarrollar al máximo sus capacidades logrando un desarrollo integral para que logre la felicidad”.

Hay que destacar que, durante el recorrido de los colegios, varias fueron las sorpresas preparadas para los asistentes, donde los alumnos y alumnas les agradecieron con bailes, un concierto de música instrumental de ensamble sinfónico, regalos, muestras del estudio de la robótica que realizan normalmente y muchas muestras de cariño y afecto por la posibilidad de contar con colegios como estos en una zona vulnerable del sector sur de Santiago.