En Chile sigue imperando “el sueño de la universidad”. La mayoría de las familias aspiran a que sus hijos ingresen a estudiar a la universidad.

En ese escenario, los colegios técnico-profesionales Nocedal y Almendral realizan una serie de acciones para encantar a los alumnos y mostrarles las posibilidades que les otorga la educación TP y que les pueden servir a futuro.

En el colegio Almendral, hasta hace algunos años, las únicas alumnas que se quedaban en el colegio eran las que se interesaban por la especialidad de enfermería. En los últimos años, se han implementado una serie de cambios que han logrado atraer a otras jóvenes a permanecer en la educación técnico profesional.

Siboney Cisternas, coordinadora de la especialidad de administración, explica que ha sido clave la metodología de enseñanza que se ha implementado, que está enfocada en la experiencia: “Este modelo genera interés porque las alumnas ven que son herramientas que son aplicables en la vida real”, explica Siboney.

Este año, por ejemplo, las alumnas de IV Medio están muy motivadas con la actividad “El empleado del mes”, que las invita a poner en práctica las competencias que debe tener el personal en una empresa. Ellas mismas se autoevalúan y evalúan a sus compañeras. También en IV Medio, las estudiantes deben crear una empresa, tal como si se tratase de una empresa real. Este año montarán una cafetería temática que será presentada a la comunidad escolar en el mes de la educación técnico profesional.

En el colegio Nocedal, el profesor Manuel Arce, coordinador de educación técnico profesional, explica que “la mejor fórmula es lograr que los alumnos lo pasen bien, que disfruten aprendiendo, que lo que hacen tenga un fin, un propósito y que, a través de esto, se puedan encantar con las tecnologías, descubrir cómo funcionan las cosas, un computador o cómo se mueve una máquina, cómo se hace un juego a través de la programación, etc. Es parte del encanto de la tecnología y es el principio basal de nuestras especialidades”.

Una vez que los alumnos están motivados, se les suma el campo laboral, la continuidad de estudios a nivel superior y las diversas posibilidades laborales en las que pueden ejercer. Finalmente, explica el docente, “todo lo que tiene que ver con las remuneraciones en el sector de las tecnologías es muy bien pagado y, con esto, cerramos el círculo”.