Un estudio desarrollado por Elige Educar evidenció un déficit –para 2025–, de más 26 mil profesores idóneos en establecimientos educativos, es decir, un 19% de los profesionales que se necesitarán para ejercer la profesión en la sala de clases durante los próximos cuatro años.
Este déficit ha llevado a que, según cifras de la Subsecretaría de Educación dadas a conocer recientemente, la cantidad de centros de educación superior que ofrecen carreras de pedagogía haya disminuido preocupantemente.
Las causas del desinterés de la juventud por matricularse en las carreras del área de la educación son diversas. Sin embargo, considerando la importancia de que Chile cuente con buenos profesores, presentamos a continuación dos testimonios de docentes jóvenes que se desempeñan en colegios de la Fundación Nocedal que pueden servir de inspiración para otros jóvenes: Sofía Larraín del colegio Trigales y Sebastián Ortiz del colegio PuenteMaipo:
¿Qué los motivó a estudiar pedagogía?
Sofía: La desigualdad social y económica de Chile son aspectos que, para mí, tienen como principal solución el mejorar la calidad de la educación. Siempre he sido partidaria de que el conformismo y la mediocridad no llevan a ninguna parte, y si hay algo que me incomode o me parezca injusto, debo hacer algo al respecto. Esa es la principal razón que me llevó a estudiar pedagogía, ya que el impacto que podemos hacer desde esta profesión es enorme.
Sebastián: Desde que era pequeño me gustaba la labor docente. Tenía aproximadamente 10 u 11 años cuando empecé a interesarme por la educación, la preocupación, la ayuda hacia otros y la satisfacción de que otras personas pueden aprender acerca de lo que tú sabes.
¿Cómo han sido sus primeros años ejerciendo la profesión?
Sofía: El 2020 llegué a trabajar al Colegio Trigales del Maipo con solo dos meses de experiencia previa. Tengo la suerte de trabajar en un equipo de excelencia que ha confiado en mis capacidades, entregándome múltiples oportunidades para seguir aprendiendo y desarrollándome profesionalmente. Sin embargo, en este escenario de pandemia, el tener una jefatura en 1ero Básico, en un colegio nuevo, ubicado en un sector vulnerable, ha sido muy difícil y desafiante.
Sebastián: Llevo 4 años como profesor. Mi primer año fue como profesor adjunto, el segundo fui profesor de asignatura en ciencias naturales, el año pasado fui profesor jefe de 2° básico y este año estoy como profesor jefe de 1°. Estos años han estado llenos de aprendizaje directo. Una de las grandes formas de saber si la pedagogía y la enseñanza es lo tuyo, es preguntarte si tienes la necesidad de que otros seres aprendan de ti y esto lo puedan replicar con otros. La vocación de servicio, la ayuda humanitaria, el cariño, el afecto y los valores deben estar incluidos dentro de tu percepción personal como para poder atreverte a ejercer esta profesión. Es una profesión un tanto compleja por todo el trabajo que conlleva, pero al final del día eres feliz haciendo lo que haces, si realmente te gusta.
¿Cómo ves la profesión docente en Chile? ¿Es valorada? ¿La recomiendas?
Sofía: Creo que la profesión docente en Chile ha estado, por décadas, subvalorada. Ser profesor es difícil, desafiante, y es una de las profesiones más importantes. Sin embargo, de a poco se ha ido creando consciencia del valor que tiene nuestra profesión. La pandemia ha ayudado a que los apoderados se den cuenta de que enseñar y manejar las conductas de los niños no es fácil, y los profesores hemos demostrado que somos capaces de adaptarnos a cualquier dificultad para lograr aprendizajes en nuestros estudiantes. Quiero creer que la pandemia en ese sentido nos ha beneficiado, y que la profesión docente será vista cada día con más respeto y admiración.
Sebastián: Recomiendo la profesión docente si realmente estás interesado en enseñar, educar, dirigir y realizar miles de cosas en beneficio de otros. Muchas personas solamente ven involucrados seguir los contenidos, las evaluaciones o una planificación, pero el capital humano y afectivo que usas con los estudiantes es lo que más importa y si no tienes eso, no puedes ser un profesor modelo. Trato de que cada día se dignifique esta profesión.
¿Por qué crees que ha disminuido tanto el interés por matricularse en esta carrera?
Sofía: Creo que el interés por matricularse en esta carrera ha disminuido por varias razones. En primer lugar, creo que la pandemia ha dejado en evidencia que ser profesor es más difícil que lo que muchos creían, que la carga puede ser excesiva y que a veces se convierte en un trabajo 24/7.
Además, por el tema de los sueldos. A pesar de la carrera docente, que me parece una buena iniciativa para mejorarlos, considero que la cantidad y calidad del trabajo que hacemos muchos de nosotros, merece un sueldo muchísimo mayor al que obtenemos.
Sebastián: Creo que es netamente por el sueldo, el trato y en cómo está conformado el sistema educativo chileno, pero cada día y cada año trata de mejorar.
¿Qué llamado le harías a la juventud que tiene vocación para enseñar pero que no se atreve a elegir ser profesor?
Sofía: Que, a pesar de todo, creo que no hay profesión más linda y llenadora que ser profesor. Es importante que tengamos claros los desafíos que esto conlleva y evitar romantizarla, pero al mismo tiempo, no debemos olvidar lo significativo que es la influencia que tienen los profesores en la sociedad.
Sebastián: Mi mensaje está más que claro. Si tienes vocación, quieres enseñar, te sientes capaz de formar a pequeñas grandes personas es el momento de atreverse. No es tarea simple ni fácil, pero cuando hay un real interés en la preocupación constante por los niños, la educación y la formación, tu deber es estudiar pedagogía. ¡Somos formadores de la sociedad!